Manuel Munive Maco
Curador General y Co Director
Por todo lo que aporta al proceso creativo de un artista visual en tanto agrupa una serie de técnicas diversas y complejas; por lo que significa para la sociedad al restablecer el vínculo con la cultura del libro; por dinamizar el mercado del arte, impulsar el coleccionismo y, en consecuencia, propiciar la sostenibilidad económica de su autor, el ejercicio del grabado debe afianzarse en el Perú garantizando su coexistencia con el resto de disciplinas que constituyen la creación contemporánea. Y esto es particularmente urgente entre nosotros ya que su enseñanza, contrariamente a lo que ocurre en otros lugares del mundo, estuvo hasta hace muy poco en riesgo de desaparecer de los programas académicos de varias de nuestras escuelas de arte.
La Primera Bienal de Grabado de Arequipa pretende constituirse en una plataforma de encuentro de los artífices de esta disciplina en el país y en un espacio para su divulgación. Desde luego que por su importancia histórica, por su patrimonio monumental, por su infraestructura cultural y por la nómina de notables grabadores que en ella trabajan, la Ciudad Blanca está en condiciones de convertirse, a corto plazo, en la capital del grabado peruano. Todas estas razones pesaron, indudablemente – además del programa de exposiciones propuesto – para que el Ministerio de Cultura otorgara, a fines del año pasado, uno de sus “Estímulos Económicos”.
